¿QUÉ ES EL FAST FASHION?

Consiste en “comprar más, usar menos”, es decir, las temporadas en las que la ropa “vive” en los anaqueles son sólo unas semanas antes de la introducción de prendas nuevas; además de que estas son fabricadas de forma acelerada y a bajo costo.

-Revista Forbes, México.

Artículo Revista Forbes

Actualmente, la industria de la moda es una de las mayores industrias a nivel internacional, representando un 5% de todo el comercio mundial, según un artículo publicado en conTREEbute, un blog dedicado únicamente a estudiar y tratar de mejorar la sustentabilidad, el año 2018.
Como cualquier industria, esta contamina gracias al alto consumo de recursos naturales e insumos químicos, además de generar vertimientos y emisiones, pero lo que hace que la industria de la moda destaque por su impacto negativo en el medio ambiente es exactamente el fast fashion o moda rápida: una continua introducción de nuevas colecciones según la tendencia actual fabricadas con un bajo presupuesto. Esto genera que la mayoría de las marcas baratas de ropa puedan ofrecer una enorme cantidad de colecciones anuales al consumidor, las cuales duran de moda poco tiempo y por lo tanto las prendas en sí tienen un tiempo de vida efímero, generando que la industria de la moda se haya convertido en un bien de consumo.
Según un estudio publicado en el blog AGUA ECOSOCIAL, un proyecto para informar sobre el agua y su gasto y proponer soluciones, este consumismo periódico se ve plasmado en que una prenda nueva se usa sólo siete veces antes de ser desechada, por lo que el consumo de ropa ha aumentado en un 400%. Esto ha generado que a lo largo de los años la industria textil sea culpable del 20% de la contaminación industrial del agua, además de generar cantidades enormes de CO2 que va directo a nuestra atmósfera. Por ejemplo, producir una polera de algodón consume 2.700 litros de agua, y unos pantalones vaqueros casi 12.000 litros.